"¡La Patrulla Fronteriza son los verdaderos terroristas!," gritaba Cristian Ramírez, Director para la frontera del American Friends Service Committee, mientras le hablaba a unas 120 personas que salieron a protestar un crimen atroz en San Diego.

El lunes 25 de febrero, la Patrulla Fronteriza de los EE.UU. atacó y arrestó a un activista muy conocido de los derechos de los inmigrantes, el coordinador de la Coalición de Derechos por la Raza.

El asalto y el arresto son el resultado de un nuevo ejercicio conjunto entre la Autoridad Metropolitana de Tránsito (MTA), una compañía privada que opera las líneas de tranvía de San Diego, y la Patrulla Fronteriza.

Las dos colaboran en un programa nuevo para asediar a los inmigrantes indocumentados que usan las líneas del tranvía. Los latinos componen cerca del 60% de los pasajeros de los tranvías y los usan principalmente para ir al trabajo y a la escuela. Este programa permite a la Patrulla Fronteriza abordar libremente el tranvía y acosar a cualquiera que ellos sospechen de "verse ilegal," y también detenerlo y arrestarlo.

Benjamín Prado, y otros activistas de la Coalición decidieron confrontar este racismo y terrorismo. En un esfuerzo por exponer este programa, Prado obtuvo una cámara de video y comenzó a documentar las incursiones de la Migra en los tranvías.

La cinta de video comenzó a capturar la realidad de este programa, gente inocente acosada y arrastrada del tren para ser arrestada o ser deportada. En un segmento, ocho personas fueron detenidas en 30 minutos.

La Migra--acostumbrada a operar con impunidad y envalentonada por la hostilidad general contra los derechos de los inmigrantes después del 11 de septiembre--decidió parar la cámara y mandarle un mensaje a Prado.

Después de filmar un segmento y de bajarse del tranvía, Prado fue atacado por seis oficiales uniformados. Los testigos dijeron que Prado no hizo nada para provocarlos. Los oficiales procedieron a golpear a Prado y llamaron por refuerzos para arrestarlo. Entonces destrozaron la cámara y la confiscaron.

Después se llevaron a Prado a la cárcel federal de San Diego por supuestamente "resistirse al arresto" y "entorpecer a un oficial federal," aunque el día en que lo arrestaron nunca le formularon cargos.

Una protesta rápidamente organizada trajo más de 120 manifestantes a la prisión federal para exigir la liberación de Prado. Afortunadamente, la presión y la atención de los medios noticiosos forzaron la liberación de Prado esa misma noche.

Este ataque se ha visto no sólo como un atentado contra los derechos de los inmigrantes pero también como un ataque contra todos los que luchan por la justicia social. Ha provocado gran malestar en todo San Diego.

Después de la protesta de hoy y de la liberación de Prado, los activistas se comprometieron a continuar organizándose para exigir el alto al hostigamiento de la Migra en los tranvías.

Esta situación muestra la realidad de una Patrulla Fronteriza racista y fuera de control, y por qué nosotros debemos organizarnos contra medidas represivas como la ley USA PATRIOT. Muestra también cómo la comunidad puede unirse para oponerse a estas injusticias.

No debiera ser Prado quien esté bajo juicio en San Diego, sino la Patrulla Fronteriza y la guerra doméstica que Bush tiene contra nosotros.

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