La compañía reportó ganancias el año pasado de $234 millones, cumpliendo así 33 años de crecimiento. Pero este éxito ha sido alcanzado disminuyendo estándares de seguridad, quebrando la ley, acosando trabajadores y destruyendo sus sindicatos, todo por lo cual el CEO de Cintas Richard Farmer se ha hecho malamente famoso.

Por esto, intentando representar a los trabajadores en Cintas, UNITE ha lanzado la campaña "Uniforma la Justicia" interponiendo 82 cargos contra la compañía por violación de las leyes federales del trabajo. De acuerdo al reporte preparado por UNITE, "Cintas: La Mugrosa Verdad detrás de los Uniformes", la compañía ha desplegado "un regimiento de personal de seguridad...para registrar actividad sindical e intimidar a los trabajadores," y usa "reuniones forzadas e interrogaciones personales" para ejercer presión sobre sus empleados.

Este tipo de actividad anti-sindical es muy conocida por Miguel C., quien trabajó para la compañía hasta que fue despedido en febrero. "Yo había hablado con el supervisor para irme más temprano, y el me dijo que estaba bien. Pero al próximo día él negó que nosotros habíamos hablado, y luego me despidieron. La verdad es que me despidieron porque yo me uní al sindicato," él le dijo a Obrero Socialista en el local de UNITE, donde estaba participando en la realización de un video para exponer estas prácticas.

Puedes encontrar más información en la internet en www.uniformjustice.org, o puedes llamar al 1-800-872-8646.

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