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ELECCIONES EN ESPAÑA
Aliado de Bush pierde

19 de marzo de 2004 | página 3

LA ESPECTACULAR derrota electoral del gobierno conservador español después de los recientes atentados terroristas en Madrid ha demostrado que la mayoría del pueblo rechazó el intento de los conservadores de manipular la tragedía para su propia ventaja.

El gobierno del primer ministro José Maria Aznar declaró justo después de los ataques que el grupo vasco, la ETA, era responsable por las bombas que mataron a más de 200 personas el 11 de marzo en Madrid. De hecho, el gobierno tenía información de que un grupo aliado con Al-Qaeda plantó las bombas--e ignoró la evidencia de que los ataques no correspondían a los métodos usados por la ETA, un grupo ilegal que exige la independencia del país vasco.

Al-Qaeda anunció que las bombas fueron en represalia por el papel de España en la guerra y la ocupación de Irak--una guerra a la que se opuso el 90 por ciento de la población española. Tales ataques contra la gente común--mayoritariamente obreros, inmigrantes y estudiantes--en un país cuya población se opuso masivamente a la guerra--son indefensibles. Estas políticas son desastrosas.

Pero Aznar y su sucesor como líder del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, trataron de engañar a los electores intentando convertir a la ETA en chivos expiatorios. El PP perdió no sólo a causa de una guerra detestada, pero también por seguir empujando un programa para fortalecer el estado central, limitar el poder de los gobiernos regionales, e imponer restricciones contra los inmigrantes.

Para el PP, estos atentados no fueron una tragedía, sino una oportunidad. Según declaró el grupo izquierdista español, Espacio Alternativo, "Aznar aprovechaba así la indignación ciudadana para llamar a cerrar filas y a movilizarse en torno a la defensa de la Constitución, anunciando futuras medidas de restricción de libertades y derechos básicos en nombre de la lucha contra el 'terrorismo'".

Este proyecto conservador incluye reformas económicas "neoliberales"--privatización, desregulación y recortes en los programas sociales--y la ilegalización de los grupos políticos que representan a las minorías nacionales.

Sin embargo, antes de que ocurrieran estos ataques, se esperaba que el PP ganara las elecciones. Pero después de las revelaciónes de que el gobierno mintió sobre el papel de la ETA, mucha gente que participó en las manifestaciónes convocadas por el gobierno contra "el terror" se unió a las protestas contra el PP el día antes de las elecciones del 14 de marzo.

La derrota de los conservadores españoles es un victória para el movimiento mundial contra la guerra. Pero el ganador de las elecciones, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), no se opone al imperialismo. Durante la guerra del Golfo Pérsico de 1991, el gobierno del PSOE presidido por Felipe González permitió que las fuerzas armadas de EE.UU. usaran las facilidades militares españolas para bombardear a Irak--y mandó buques de guerra para bloquear a ese país. El movimiento anti-guerra español debe continuar su lucha.

Sin embargo, después de estos eventos en España, será más dificil para George W. Bush y sus aliados el usar al "terrorismo" como justificación para la ocupación de Irak. Aquí en las entrañas de la bestia, tenemos que organizarnos también y reenfatizar nuestras demandas: ¡EE.UU. fuera de Irak--y alto a la ocupación ahora!

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