NOTE:
You've come to an old part of SW Online. We're still moving this and other older stories into our new format. In the meanwhile, click here to go to the current home page.

Acorralan a miles en redadas anti-inmigrantes en California

Por Sarah Knopp | 23 de julio de 2004 | página 2

LA PATRULLA Fronteriza ha lanzado una ofensiva mayor de redadas anti-inmigrantes en el sur de California. "Ellos van a las lavanderías y escuelas y a las tiendas, deteniendo a personas cuando se bajan del autobús", dijo a los periodistas el Reverendo Arnoldo Abelardo de la Iglesia de La Placita en Los Angeles.

Las redadas se enfocaron en el condado norteño de San Diego y en el vecindario Inland Empire de Los Angeles, pero han sucedido bloqueos y redadas desde el distrito de la Misión en San Francisco, y hasta en el vecindario South Central de Los Angeles. La Agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE por sus siglas en inglés), antes conocida como el Servicio de Inmigración y Naturalización (INS), confirmó que ha habido centenares de arrestos. Pero el número exacto se disputa.

Juan José Gutiérrez, líder del Movimiento Latino de EE.UU. y de One Stop Immigration Services, dijo a Obrero Socialista que si se incluyen las detenciones recientes en la frontera, entre 7,000 y 9,000 personas fueron detenidas en junio. "Ellos fueron a las tiendas y las fábricas y a la industria textil [en Los Angeles] y se llevaron a la gente de su trabajo", Moisés Ruiz, del Movimiento Latino de EE.UU., dijo a Obrero Socialista.

Tras estas redadas, muchos trabajadores indocumentados tienen miedo de ir al trabajo, a la escuela, a la iglesia o a otros lugares públicos. Los "disc jockeys" de la radio anti-inmigrante en el área de Los Angeles contribuyen al terror. Les dan a sus oyentes el número de teléfono de un grupo de la comunidad de derechos pro-inmigrantes, instigando a que lo acosen.

Esta nueva ofensiva viene junto con un aumento significativo en la financiación que recibió la Patrulla Fronteriza desde que llegó a ser parte del Departamento de Seguridad Doméstica. El nuevo sitio de la red del ICE se jacta de que la agencia ha desarrollado "una estrategia completa de aplicación de leyes nacionales...la cual crea una red impenetrable que extiende la implementación de leyes desde la frontera y más allá, hasta al lugar de empleo".

Y si una propuesta de ley pendiente ante el Congreso--la Ley Clara para la Aplicación de la Remoción de Extranjeros (CLEAR, por sus siglas en inglés)--se aprueba, los policías estatales y locales podrán cooperar con funcionarios federales de inmigración en las deportaciones.

Pero muchos trabajadores indocumentados y grupos comunitarios están resistiendo la ola anti-inmigrante. El 13 de junio, manifestantes marcharon desde la ciudad de Ontario hasta Pomona, tildando las redadas de ICE como una forma de "perfil racial". Maestros, líderes religiosos y líderes de comunidad se expresaron en ruedas de prensa en las sedes de ICE en San Francisco, Los Angeles e Inland Empire.

Y el 26 de junio, las organizaciones comunitarias se reunieron para una marcha de emergencia en Los Angeles. Unas 400 personas acudieron a la marcha--que fue convocada por el Movimiento Latino de EE.UU., la Hermandad Mexicana Nacional, el Gremio Nacional de Abogados (NLG), el Comité Anti-Discriminación Árabe-americano y muchas redes de apoyo comunitario, como también grupos anti-guerra.

La concurrencia fue más pequeña que previas manifestaciones pro-derechos de los inmigrantes a causa del temor creado por las redadas. Pero miles de trabajadores indocumentados en el distrito de la industria textil en Los Angeles se tiraron a la calle para mostrar su apoyo. "Los políticos saben que necesitan todo el trabajo duro que hacemos", Juan Jose Gutierrez dijo a la multitud. "No pueden acallarnos a base de miedo".

Los grupos que planearon la marcha del 26 de junio han convocado a un día de acción para todo el estado el 16 de octubre para protestar el décimo aniversario de la anti-inmigrante Propuesta 187. Necesitamos organizar esta lucha para repeler los ataques de la derecha.

Página principal | Reportajes de este número | Retornar arriba