¿El fin del embargo a Cuba?
En diciembre, los gobiernos de EE.UU. y de Cuba anunciaron planes para reabrir relaciones diplomáticas. Eso representa un enorme cambio después de 50 años de hostilidades, que incluyeron invasiones respaldadas por los Estados Unidos, bloqueos navales, sabotaje económico e intentos de asesinato de los líderes cubanos. Sam Farber, autor de Cuba Since the Revolution of 1959: A Critical Assessment (Cuba desde la revolución de 1959: Una evaluación crítica), es entrevistado por Lance Selfa acerca de estos eventos.
¿CUÁLES CREE son las razones principales para el relajamiento de las relaciones entre los EE.UU. y Cuba en este momento? ¿Podría hablar al respecto, tanto desde la perspectiva estadounidense como desde la perspectiva cubana?
CREO QUE fueron varios los factores que impulsaron este cambio, aunque era imposible predecir el momento en que éste iba a ocurrir. Ciertamente el fin de la Guerra Fría, y el repliegue cubano de África durante la misma época, disminuyó la importancia de Cuba en la política exterior estadounidense a un grado tal que apenas era mencionada en los estudios estratégicos publicados por el Departamento de Defensa y el de Estado, durante las dos últimas décadas. Eso fue lo que redujo la presión proveniente de la antigua Guerra Fría.
También está el hecho de que los capitalistas norteamericanos están cada vez más a favor de comerciar con Cuba. En el 2000, EE.UU. aprobó una ley que permite la exportación a Cuba de productos agrícolas y procesados. Como consecuencia de dicha ley, Archer Daniels Midland, Tyson Foods y otras compañías estadounidenses comenzaron a comerciar con Cuba. Muchas otras empresas están también a favor de establecer relaciones comerciales, salvo la derecha más extrema de los capitalistas. Además, desde hace un tiempo el Pentágono ha estado a favor de reanudar las relaciones con la isla y se ha estado reuniendo con autoridades cubanas para discutir la logística de la base naval de Guantánamo, la interdicción de drogas y otros temas.
Por último, aunque no por eso menos importante, la influencia de la derecha de Miami ha disminuido. El área del Condado de Dade todavía tiene tres miembros cubano-americanos derechistas en el Congreso, pero el apoyo a sus políticas ha disminuido. Esto se debe, a que la composición social de la comunidad cubana ha cambiado significativamente. Actualmente la mayoría de los cubanos y cubano-americanos en el sur de Florida son personas que llegaron [de Cuba] después de 1980. Y esa mayoría ha ido creciendo. Por lo menos entre 20.000 y 30.000 cubanos llegan a EE.UU. cada año, y la vieja generación está muriendo, aun así sigue controlando en gran medida los medios de comunicación y el sistema político debido a su poder económico.
Todos estos factores que operan del lado estadounidense han contribuido a crear una situación favorable que los políticos norteamericanos están tratando de aprovechar, por todo tipo de razones, para moverse en relación a Cuba.
Por su parte, Cuba ha estado enfrentando una situación económica apremiante con una tremenda baja en la inversión. El ministro de economía de Cuba ha estimado que se necesitan alrededor de $2 mil millones al año para lograr un despegue económico. Cuba reinvierte capital a la mitad del nivel del resto de América Latina y su productividad, comparada con los estándares latinoamericanos, es muy baja. El crecimiento económico también ha sido muy bajo en los últimos años, y sólo un poco más del 1 por ciento en el 2014.
Todo esto ha conllevado a una situación en la que ambas partes están dispuestas a hacer un reajuste en sus relaciones, y tras las elecciones del 2014, Obama decidió que éste sería el momento político perfecto para hacerlo.
¿CÓMO CARACTERIZARÍA la magnitud de la apertura de las relaciones diplomáticas? Según yo lo entiendo, Obama puede implementar ciertos cambios basado en las prerrogativas de su poder ejecutivo, pero es el Congreso el que tendría que derogar la Ley Helms-Burton. ¿Me puede Ud. decir cuáles son algunas de las limitaciones en los acuerdos a los que se pueden llegar en este momento?
LA LEY Helms-Burton, aprobada por el Congreso y firmada el presidente Bill Clinton en 1996, prohíbe toda actividad económica entre Estados Unidos y Cuba --por ejemplo, prohíbe la inversión de las empresas estadounidenses en Cuba.
El presidente Obama ha implementado cambios menores al margen de esa ley para relajar no sólo la política, sino la relación económica entre Cuba y EE.UU. Así por ejemplo, pudo liberalizar las remesas a Cuba de los cubano-americanos en EE.UU., remesas que se proyecta van a aumentar de $1,5 mil millones de dólares anualmente en el 2014, a más de $2 mil millones en el 2015. En otras palabras, se espera al menos un aumento del 25 por ciento de las remesas durante el año próximo. Sin embargo, el problema principal es que no puede haber relaciones económicas normales entre Cuba y EE.UU. porque siguen estando prohibidas por la Ley Helms-Burton.
Es al Congreso a quien le toca modificar o derogar la Ley Helms-Burton. Un número significativo de republicanos, como el senador Jeff Flake de Arizona, está a favor de hacerlo. Pero no se sabe si habrá un número suficiente de republicanos y demócratas que logren aprobar un cambio. Hay demócratas que están totalmente opuestos a cambiar la ley, como el senador Robert Menéndez de Nueva Jersey, un cubano-americano que por muchos años ha estado aliado con los elementos más derechistas de la comunidad cubana del sur de la Florida.
Este no es un asunto que claramente divide a republicanos de demócratas. Corta a través de las líneas partidarias, aunque aún no he visto ninguna evaluación del número de republicanos y demócratas dispuestos a votar por la derogación de esa ley.
¿QUÉ SIGNIFICARÍA para los cubano-americanos que tienen familia en Cuba si la Ley Helms-Burton no es derogada?
LAS MODIFICACIONES al margen de la Ley Helms-Burton que Obama implementó ya han cambiado significativamente la situación de los cubano-americanos, en el sentido de que ahora pueden, por ejemplo, enviar remesas monetarias prácticamente sin ningún límite a sus parientes más cercanos –sus padres, hermanas, hermanos-- en Cuba. Los viajes a la isla, ya liberalizados por parte de Cuba, se han liberalizado ahora por parte de los EEUU. Como resultado, habrá cada vez más personas que visiten la isla. Ya hay muchos que han ido, especialmente desde que el gobierno cubano permitió que los cubano-americanos llevaran a sus familiares en Cuba a los hoteles en la isla. Es así como Varadero, el principal centro turístico en Cuba, está lleno de cubanos en hoteles pagados por sus parientes en Miami.
Así es que hay mucho que ya ha cambiado, y que va a cambiar aún más. También hay cosas los cubano-americanos no podrán hacer. Un ejemplo son los hermanos cubano-americanos Fanjul, los principales propietarios de las fábricas de azúcar en Florida, que habían sido muy hostiles al gobierno cubano, ahora han dado un giro a favor de las relaciones económicas con Cuba. Fueron a Cuba y hablaron con el gobierno cubano, pero no podrán invertir en la isla los millones de dólares necesarios para abrir un nuevo central azucarero en Cuba, porque legalmente no lo pueden hacer. Está prohibido por la Ley Helms-Burton.
MUCHOS DENTRO de la izquierda han caracterizado esta apertura como una victoria para el pueblo cubano. ¿Cómo lo ve Ud.?
TAMBIÉN LO veo así, en el sentido de que hasta cierto grado --y diría que un grado importante-- el re-establecimiento de las relaciones diplomáticas con Cuba ha derrotado la noción de que EE.UU. tiene el derecho de imponer en Cuba su sistema socio-económico y político, y que puede castigar a la isla económicamente, si Cuba no lo acepta. Y no a través del mecanismo de las fuerzas del mercado, sino por medios extra-económicos.
Hay que tener en cuenta que no fue el mercado, sino esas medidas extra-económicas las que contribuyeron al empobrecimiento del pueblo cubano. Supuestamente, el neoliberalismo se opone a cualquier interferencia política en el mercado. Pero el bloqueo es una interferencia política en el mercado y la imposición de sanciones contra Cuba está completamente fuera de lo que la ideología burguesa del neoliberalismo permite como acción legítima. Es de esta manera y hasta este grado que la reciente apertura es una derrota para los que sostienen que EE.UU. puede ejercer su poder para aprobar o desaprobar un gobierno extranjero y su sistema económico, y para castigarlo por medios extra-económicos. Es en este sentido que esta apertura es, sin duda alguna, una victoria.
¿QUÉ PIENSA acerca de la delegación del Departamento de Estado que está por iniciar pláticas con representantes cubanos de alto nivel en enero? El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ha anunciado que va a encabezar una misión comercial. ¿Qué más puedes decir al respecto?
¡ME IMAGINO que todas estas misiones gubernamentales a Cuba contribuirán significativamente al aumento del turismo en Cuba el año entrante! Mientras tanto, una delegación de los miembros demócratas del Congreso está actualmente en Cuba, y el gobernador Cuomo está planeando ir allá, lo mismo que la Secretaria de Comercio Penny Pritzker.
Acabo de leer una declaración firmada por políticos e gente importante de negocios, incluyendo a George Shultz, el Secretario de Estado bajo Ronald Reagan, esencialmente abogando por la normalización de las relaciones con Cuba. No mencionan explícitamente la revocación o modificación de Helms-Burton, pero más o menos lo implican. La declaración también fue firmada por otras figuras del establecimiento, como Bill Richardson que fue gobernador de Nuevo México, embajador de la ONU y Secretario de Energía. Es obvio que en los círculos de la política oficial y de las empresas estadounidenses hay un gran interés por impulsar la normalización de relaciones con Cuba.
¿QUÉ IMPACTO cree que el re-establecimiento de las relaciones entre los Estados Unidos y Cuba va a tener en América Latina? Estoy pensando sobre todo cómo esto puede afectar el papel de Cuba como anfitrión de los diálogos entre el gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC, y la estrecha relación de Cuba con el gobierno venezolano. ¿Qué impacto cree que esto tendrá en la influencia de los EE.UU. en la región?
UNA DE las consideraciones de Obama para reestablecer las relaciones con Cuba fue cambiar la postura de los Estados Unidos en América Latina y eliminar una fuente continua --y muy importante-- de irritación en esa región contra los EE.UU. Creo que ésta fue una consideración muy importante en sus cálculos. Desde su perspectiva, el restablecimiento de relaciones facilitaría hacer frente a Venezuela y a otros países del hemisferio, particularmente los de centro-izquierda, tanto los menos radicales como Ecuador, como los más radicales como Venezuela. Neutralizaría el tema de Cuba, lo que le facilitaría tratar con estos países.
No estoy sugiriendo ni por un minuto, como otros lo han hecho, que Cuba va a disminuir el apoyo que le ha brindado a Venezuela y a los demás países de centro-izquierda en América Latina. Ese no va a ser el caso en tanto que las circunstancias actuales se mantengan. Pero para los EE.UU., los acuerdos con Cuba aligerarían el trato con esos países. Estoy convencido que consideraciones de política exterior fueron gran parte de lo que motivaron la reciente decisión de Obama. Y creo que son las mismas consideraciones que motivaron a gente como George Shultz a firmar peticiones solicitando normalizar las relaciones con Cuba. Esto es sin duda parte de la ecuación.
¿CREE USTED que esta apertura va a inaugurar un proceso de cambio político dentro de Cuba? Si es así, ¿en qué dirección, y acaso esto le importa a los EE.UU.?
SÍ, PERO creo que este proceso es una cuestión a largo plazo. Mientras tanto, no cabe duda que la apertura ha sido una victoria para el gobierno cubano. Es curioso que ahora el gobierno cubano ha tenido el descaro de empezar a atacar a los disidentes por supuestamente poner en peligro las nuevas relaciones con los EE.UU., como en el caso de la artista Tania Bruguera. Ella trató de montar un espectáculo en la Plaza de la Revolución, y el gobierno se lo impidió y la arrestó acusándola de perturbar la reanudación de relaciones con los EE.UU. En el pasado, la acusación que el gobierno esgrimía contra los disidentes era que le estaban haciendo el juego al bloqueo; ahora los acusa de interferir en las relaciones con los EE.UU.
Pero a mediano y largo plazo, creo que la apertura va a socavar la legitimidad del gobierno porque hay un límite hasta el cual este puede continuar afirmando que los problemas económicos de Cuba son simplemente la culpa del bloqueo. Especialmente si se modifica o se deroga la Ley Helms-Burton, lo que sin duda socavaría la legitimidad de la ideología del gobierno cubano, que ha afirmado que el bloqueo es la razón más importante detrás del desastre económico en la isla.
EL GOBIERNO cubano parece estar enamorado del modelo económico de China o Vietnam. ¿Cree Ud. que es ésa la dirección que quiere tomar? Y teniendo en cuenta lo que acaba de mencionar sobre la posibilidad de un cambio político en Cuba, ¿es ese modelo viable?
BUENO, CREO que esa es su meta. Pero cuando hablo del modelo vietnamita o chino, no quiero decir que Cuba puede o va a utilizar a la población campesina para reforzar su fuerza de trabajo industrial como lo hizo China. La población rural de Cuba es sólo el 25 por ciento de la población. Eso es muy diferente de China y Vietnam. Entonces no me estoy refiriendo a una política económica específica. Más bien me refiero a un sistema social caracterizado por un estado de partido único, donde no hay democracia alguna y donde, al mismo tiempo, existe una inversión privada sustancial --especialmente extranjera, en sectores importantes de la economía-- con un Estado que preserva para sí mismo, como en China, las palancas fundamentales de la economía, como el sector financiero, por ejemplo, que hasta ahora sigue estando monopolizado por el estado chino. Es eso lo que creo que el gobierno cubano está tratando de implementar.
El problema de Cuba ha sido que se mueve dos pasos hacia esa dirección y luego da un paso para atrás. Sospecho que se debe a la resistencia de la burocracia a moverse en esa dirección, porque muchos de los burócratas van a perder su poder y los feudos de los que derivan su poder. Y Raúl Castro ha tratado de no agitar las aguas demasiado para no provocar demasiado la resistencia burocrática. Es por eso que éste ha sido un proceso contradictorio.
VI QUE Cuba abrió recientemente una zona franca industrial en Mariel. ¿Cree Ud. que los planificadores económicos cubanos quieren convertir a Cuba en una zona franca industrial como Vietnam o Macao?
HASTA AHORA, el puerto de Mariel no ha tenido éxito económico. La Organización Odebrecht, una gran empresa brasileña, ha invertido una gran cantidad de capital en la renovación y modernización del puerto de Mariel, que incluye una zona de libre comercio. Afirman que una vez que se termine de construir la expansión del Canal de Panamá, los súper-barcos tendrán que usar las facilidades de Mariel como un trampolín para llegar a los Estados Unidos o a Europa. Pero por el momento el nuevo puerto de Mariel no ha tenido el éxito que se esperaba.
El hecho es, que hasta este punto, Cuba no tiene mucho que ofrecer en cuanto a la industria o la agricultura. Lo que sí tiene es un sector de servicios bastante desarrollado. Un ejemplo es la industria del turismo, que ha generado gran entusiasmo. En el 2014, Cuba recibió 3 millones de turistas. Es concebible que para finales de 2016 el número aumente a 4 millones. Eso va a crear enormes presiones sobre la infraestructura y la hotelería de la isla, lo que muy posiblemente aumente el interés del capital español en participar en la actividad hotelera en Cuba.
Cuba tiene también un sector biotecnológico y farmacéutico muy prometedor. Ya hay de hecho uno o dos proyectos con empresas estadounidenses para desarrollar medicinas. Ese tipo de colaboración puede crecer, pero creo que eso es una posibilidad de largo plazo.
¿HAY ALGO más que nuestros lectores deben saber?
A MEDIANO y largo plazo, la ideología predominante del gobierno cubano, que justifica su situación económica en términos del bloqueo, va a perder validez y va a empezar a ser abiertamente desafiada. Junto con cierto grado de liberalización --aunque no democratización-- que ya ha ocurrido en la isla, el creciente desafío a la ideología del gobierno promoverá la posibilidad de una resistencia en Cuba y un creciente movimiento de protestas contra las políticas del gobierno.
En China, a pesar de ser un Estado de partido único, ocurren decenas de miles de protestas todos los años que han conllevado, entre otras cosas, al aumento de los salarios hasta el punto que varias empresas han empezado a retirarse de China. Bangladesh, por ejemplo, se ha convertido en un centro muy grande de la industria textil porque el trabajo chino ya no es rentable al mismo grado que antes.